Construyen un campo magnético 2M de veces más fuerte que el de la Tierra

 China arranca la construcción de un nuevo sistema de imanes que servirá para desarrollar nuevos semiconductores, sistemas de comunicación o medicamentos

 TIMSANET

La ciudad de Wuhan, situada en el corazón de China, será la sede del imán pulsado más potente del mundo. La nueva infraestructura, que arrancará su construcción el próximo martes, estará lista en unos cinco años y ayudará a los científicos a realizar experimentos clave para el avance de la medicina, las comunicaciones o la búsqueda de nuevos materiales.

 

Según informa el medio ‘Science and Technology Daily’, la revista oficial del Ministerio de Ciencia y Tecnología chino, el nuevo imán costará más de 2.000 millones de yuans (unos 287 millones de euros) y estará situado en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong. Este dispositivo produce pequeños pulsos que se espera que generen durante pocos segundos un campo magnético de 110 tesla, más de dos millones de veces más potente que el de la Tierra.

 Si lo consiguen superarán el actual récord del Laboratorio Nacional de Los Álamos, en el estado norteamericano de Nuevo México, que es capaz de lograr un campo magnético pulsado de 100 tesla. Aunque este no sería el primer récord de campo magnético que consiguen los asiáticos. A mediados de agosto, la Academia de las Ciencias de China anunció el lanzamiento del campo magnético estable más potente del mundo (con 45,22 tesla) en la ciudad de Hefei, al sureste del país. Esta instalación tiene un imán resistivo de 32 milímetros que está colocado en un agujero en el centro de un imán superconductor y que al unir sus fuerzas crean un campo magnético increíblemente fuerte.

Para qué quieren un campo magnético tan potente

Estas instalaciones generan campos magnéticos que logran crear un entorno extremo que ayuda a los investigadores a observar estructuras de materiales, comportamientos de partículas subatómicas y procesos de las formas de vida que serían imposibles de realizar en circunstancias normales.

 

Una tecnología extremadamente peligrosa

Generar un campo magnético tan potente no es nada fácil. El imán requiere un generador eléctrico capaz de producir más de un gigavatio de potencia y estar protegido con materiales especiales que puedan absorber tanto el calor como los impactos generados por los impulsos. Esas reacciones son lo suficientemente fuertes como para levantar un portaaviones, asegura el medio hongkonés.

Pero es que además, estos experimentos con campos magnéticos pueden resultar tremendamente peligrosos. Un equipo de científicos en Japón fue capaz de crearen 2018 el campo magnético más fuerte de la historia con 1.200 tesla.

 La fuerza generada fue tan grande que el imán acabó destruido y la puerta blindada del laboratorio salió volando por los aires. Los investigadores ya esperaban un resultado a partir de los 700 tesla y se resguardaron en la cabina de control para no sufrir daños. El potente estallido se puede ver en el vídeo que hay sobre estas líneas.